La tecnología de carbono extremo va más allá del ahorro de peso: se trata de maximizar la resiliencia bajo mucho estrés y una conducción agresiva.
Estos componentes están diseñados para absorber los impactos manteniendo la rigidez torsional, garantizando el control y la estabilidad del ciclista.

Los ciclistas se benefician de una mejor retención de energía, un manejo mejorado y un equipo que resiste exigencias repetidas.
Conduce con más fuerza, más rápido y con más resistencia con componentes diseñados para adaptarse a la intensidad de tus objetivos y al terreno.